Para crear un ambiente de trabajo se necesita un espacio.
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Pues el principal problema que veo, nada más llegar al aula de infantil, son las dimensiones de la misma; son aulas muy pequeñas para desarrollar una metodología por rincones, (en E. Primaria pasa exactamente igual, o peor).
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Algunas cabezas pensantes emplean una lógica que no se puede aplicar en el contexto de la escuela: como la ratio, se supone, es de 25 alumnos-as por clase , mucho más baja que hace años, pues ¿qué hacer? A menos alumnado, reducimos las dimensiones de las aulas en los colegios de nueva creación. ¡Error! 25 alumnos de ahora necesitan el mismo espacio que 40 alumnos de antes.
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Alguien que tiene poder de decisión a altos niveles no cae en la cuenta de que, aunque haya menos niños, es necesario tener un material muy variado. ¿Dónde colocas los ordenadores?, ¿dónde la zona de pintura?, ¿dónde la biblioteca de aula?, ¿dónde las estanterías para que el material esté bien ordenado?, ¿dónde el material de repuesto?...imposible.
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Así que te pones a distribuir los rincones y queda todo demasiado junto. Pero si distribuyes el mobiliario pensando en la enseñanza escolástica -todo el alumnado hace lo mismo al mismo tiempo y el profesorado imparte clases magistrales- la clase queda más espaciosa. No me extraña que la mayoría del profesorado opte por esta opción, clases magistrales y que nadie se mueva de su sitio.
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"El ambiente de aprendizaje: Diseño y organización" es un libro de C.E. Loughlin y J.H. Suina, M.E.C. Ediciones Morata, S.A.; colección Pedagogía infantil, 1987
En la página 40 habla del aula demasiado pequeña.
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Voy a releerlo urgentemente.
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